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| Milton William Cooper. |
El ex asesor del gobierno
estadounidense y astrónomo aficionado Timothy Ford reveló que, en
las últimas décadas, varios ufólogos y expertos en armas
espaciales de Estados Unidos y el Reino Unido han fallecido en
extrañas circunstancias...
De acuerdo a lo publicado por el
periódico chino “Pueblo en Línea”, Ford lleva 30 años
investigando el fenómeno ovni, sospecha que la muerte de sus pares
pudieron haber sido efectuadas por organismos de inteligencia de los
gobiernos de esos países por “saber demasiado”.
Una de las primeras muertes que
menciona es la del astrónomo Morris Jessup de Rockville, Indiana. El
experto se interesó toda su vida por los ovnis, pero en abril de
1959 se suicidó.
Durante esa década, la fuerza aérea
estadounidense tenía un proyecto secreto de recopilación de
testimonios de avistamientos de ovnis y extraterrestres. El oficial a
cargo, era Edward Rupert, quien en 1960 murió repentinamente de un
ataque al corazón, según consignó la fuerza armada a la que
pertenecía.
Otro caso importante fue el de James
Edward McDonad, físico de la Universidad de Arizona. Se destacó por
entrevistar a, al menos, 500 testigos de objetos voladores no
identificados y por revelar varios casos de ovnis ocultados por el
gobierno de Estados Unidos. En junio se 1971, se quitó la vida de un
disparo a la orilla de un arroyo cerca de la ciudad de Tucson.
El famoso ufólogo estadounidense
Milton William Cooper, murió en su casa a manos de la policía en el
2001. Él había revelado información respecto al ocultamiento de
tecnologia extraterrestre y teorías sobre el asesinato de Kennedy,
además de la creación de un Nuevo Orden Mundial.
Especialistas en armas espaciales
En tanto, en Gran Bretaña, se
registraron al menos 25 muertes misteriosas de especialistas en armas
espaciales durante los años 80′. Como ejemplo, Timothy Ford
destaca el deceso de Ashaad Sharif, experto en informática y armas
espaciales de Sistemas de Defensa Marconi en Stanmore, Middlesex,
Inglaterra. En octubre de 1986 se quitó la vida.
Shariff había trabajado en un proyecto
del gobierno británico sobre armas electrónicas espaciales, similar
al proyecto norteamericano “Guerras de las Galaxias. Su compañero
en dicho proyecto, Vimal Dajibhai, se mató a los días después,
saltando desde el puente de Bristol.
Sin embargo, los extraños decesos
aumentaron: el ingeniero Mark Wisner se habría ahorcado, el profesor
Stuart Gooding falleció en un accidente, David Greenhalgh se suicidó
saltando de un puente y Shani Warren fue encontrada ahogada. Todos
dejaron este mundo en abril de 1987. Un mes después, otro de los
científicos, Michael Baker murió en un accidente automovilístico.
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