En la web existe un interesante reportaje sobre los últimos estudios científicos sobre biomagnetismo y en donde se vaticina un cierto caos frente a un cambio en la polaridad de los polos, vaticinado por los mayas para el 2012. Allí se señala, que la vida en nuestro planeta depende mucho de los cambios magnéticos existentes en ella y ello se debería a que cada célula, viva o muerta, está compuesta por moléculas y cuando entran en un campo magnético, todas las moléculas se tornan un poco magnéticas y es por esa razón que los animales, incluyendo al Hombre, responden al campo magnético.
Los científicos creen que una clase de hierro, llamada “magnetita”, tiene relación con la percepción magnética presente en los seres vivos. Por ejemplo un grupo con esta característica son las aves: al igual que el Sol y las estrellas, las palomas mensajeras tienen una brújula interna. Si se les coloca pequeños imanes, éstos interferirán en su orientación. De la misma forma, una transición sin un polo magnético claro (sin un norte y un sur) produciría problemas. Según una teoría, caos magnético, podría significar caos social. Las evidencias clínicas, manifiestan que el magnetismo afecta nuestro bienestar mental y generaría problemas como la depresión. Los médicos saben que la enfermedad depresiva se desencadena más frecuentemente durante la primavera y el otoño, justo cuando existe una mayor actividad electromagnética proveniente del Sol, que afecta al campo magnético que rodea a la Tierra. Hay algunos, que aseveran, que no sólo influye en nuestro estado emocional, sino que puede influir en conflictos violentos.
El magnetismo terrestre tendría que ser como la luz del Sol: esencial para el funcionamiento de las células vivas y tal vez, sea así... Para mayor información busquen “caos electromagnético” en Youtube.
No hay comentarios:
Publicar un comentario