En las anteriores publicaciones he comentado dos de las siete profecías mayas. La primera de ellas, referente al gran salón de los espejos y la otra, a los cambios económicos y sociales que se han dado en el mundo tras el eclipse solar de 1999. El tema de hoy es mucho más latente, pues sus efectos se están sintiendo y de ello ya ha hablado el ex candidato a la Casa Blanca, Al Gore, a través de un documental llamado “Una verdad incómoda” y el cineasta Roland Emmerich con su película “El día después de mañana”.
La tercera profecía maya dice que una ola de calor aumentará la temperatura de la Tierra, produciendo cambios climatológicos, geológicos y sociales en una magnitud sin precedentes, y a una velocidad asombrosa; los mayas dicen que el aumento de la temperatura se dará por varios factores, uno de ellos generado por el hombre que en su falta de armonía con la naturaleza solo puede producir procesos de auto destrucción, otros serán generados por el sol que al acelerar su actividad por el aumento de vibración produce más radiación, aumentando la temperatura del planeta.
Por esta advertencia de la tercera profecía de los Mayas, se hace impostergable y urgente un cambio de conducta en lo individual y colectivo para asumir el compromiso de la practica cotidiana de acciones que ayuden a mejorar la ecología del Planeta hasta lograr la plena armonía del actuar del ser humano con el entorno, a sabiendas de que el comportamiento del hombre será crucial para sobrellevar el aumento general de la temperatura causada por su propia conducta inconsciente y depredadora. Les recomiendo que pongan “Tercera Profecía Maya” en el buscador de Youtube; ahí sale más información al respecto.
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