Según un informe publicado hoy por el periódico inglés “The Guardian”, los científicos que elaboraron la vacuna para combatir la gripe humana (y que la OMS recomendó almacenar a los distintos gobiernos en caso de una pandemia de la misma), habían sido previamente pagados por las compañías farmacéuticas que querían aprovecharse del pánico reinante. La investigación, que fue realizada por el British Medical Journal y Bureau of Investigative Journalism, demuestra que las directrices establecidas por la OMS en 2004 fueron escritas por tres científicos que habían recibido previamente el pago de otros trabajos de Roche, que produce Tamiflu, y GlaxoSmithKline (GSK), fabricante de Relenza.Los analistas dicen que las compañías farmacéuticas se echaron al bolsillo más de 7 mil millones de dólares tras el almacenamiento de las drogas efectuado por los gobiernos. El tema de la transparencia en la salud pública ha pasado al primer plano después de que las dramáticas predicciones, hechas el año pasado acerca de una pandemia de gripe porcina, no se hicieran realidad.
Algunos países, especialmente Polonia, se negaron a la compra masiva de vacunas y antivirales cuando la OMS declaró el brote de gripe porcina como una pandemia. Por su parte, el gobierno británico ya ha puesto en marcha una investigación acerca del costo que les ha significado a sus ciudadanos el pánico generado por la compra de medicamentos. Hoy en día, el Consejo de Europa, elaboró un escalofriante informe sobre la falta de transparencia en torno a "la toma de decisiones" que ha acosado a la planificación para pandemias.
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